Por Verónica Mayorga Alderete
Muchos conflictos violentos que se
están presentando actualmente como
los hechos dolorosos que ocurrieron
en la ciudad de Torreón, nos muestran
claramente los errores que como padres
estamos cometiendo..
Los padres de familia nos estamos
mostrando temerosos o flojos para ejercer
nuestra autoridad o delegando a terceras
personas la crianza de nuestros hijos por
innumerables razones algunas válidas y
otras no tanto.
Y nuestros niños van creciendo y el
problema junto con ellos, ya que como
padres nos cuesta trabajo tomar la decisión
de poner límites y ejercer su autoridad de
forma correcta.
¿Por qué tus hijos hacen lo que hacen?
PORQUE TÚ LOS DEJAS.
Hacen lo que hacen porque tú se los
permites.
Los hijos se convierten en lo que son,
porque sus padres lo permiten, así de
sencillo.
Y puedes encontrar miles de razones y
culpables, pero la realidad solo es una, tú
los dejas hacer lo que ellos quieren.
NO HAY CONSECUENCIAS DEL MAL
COMPORTAMIENTO.
Los padres dejan hacer a sus hijos lo
que quieran, con muy poca información de
lo que es aceptable y lo que no lo es.
Si ellos hacen algo mal, no hay
consecuencias por el comportamiento
inaceptable, y no me refiero a golpes o
malos tratos.
Algunas veces decimos: “si haces
esto te va a pasar aquello”, y “si no haces
aquello te va a pasar esto”, después ellos
no hacen lo que tienen que hacer y no
pasa nada, no cumplimos la promesa de
las consecuencias advertidas.
¿Sabes en qué se convierte un padre
que no cumple con las consecuencias
advertidas? En un MENTIROSO; y eso
justamente aprenden nuestros hijos, a
mentir, y a prometer sin cumplir, al fin que
no pasa nada.
TÚ LES DICES A TUS HIJOS QUE
SON ESPECIALES.
Quizás no vas a estar de acuerdo
conmigo en esto, créeme que a mí también
me resultó difícil entenderlo y aceptarlo,
pero es una realidad.
Si tú eres de los que actualmente cree
que su pequeña Bendición es especial,
lamento decirte que no lo es; si tú les
dices a tus hijos constantemente que
son especiales, los perjudicas más que
ayudarlos.
TU HIJO ES ESPECIAL PARA TI......y
solo para ti, no lo es para nadie más.
Tu hijo nació con todo tu amor y verlo
crecer es toda una maravilla, sin embargo
cuando crece y cruza tu puerta para ir a la
escuela, él, solo es un niño más en la lista
de la escuela, y no hay nada de especial
acerca de él.
En el mundo real, tu hija no es una
princesa, ni tu hijo un príncipe, sólo es un
niño más.
Los hijos deben entender y aprender a
crecer sabiendo que al instante que dejen
tus amorosos brazos y entren al mundo
real, nadie los amará por la única razón de
que ellos existen, como lo haces tú.
TÚ HACES QUE TUS HIJOS SEAN LA
COSA MÁS IMPORTANTE EN TU VIDA.
Ellos no lo son. Yo sé que tú piensas
que lo son pero no es así; cuando tú dejas
pensar a tus hijos que son la persona más
importante en tu vida, ellos aprenden a
manipularte y tú terminarás haciendo lo
que ellos digan.
Tus hijos son importantes, no me mal
entiendas, tus hijos deben ser amados
incondicionalmente; pero los padres que
ponen por encima de todo, la felicidad
de sus hijos y sacrifican su propia vida y
algunas veces su matrimonio también,
entonces cuando acabe la labor como
padre, tus hijos crecerán y te dejarán, e
irán en busca de su propia felicidad o un
fenómeno que se esta dando actualmente
se quedan en casa de sus padres aún
siendo adultos con todas las comodidades
que esto implica, jamás maduran y a
veces se vuelven unos parásitos para la
sociedad.
Esto mismo pasa con las madres y
padres solteros, ellos gastan todo su
tiempo y energía en sus hijos, sacrifican
su propia vida, pensando que lo mejor
es servirlos y poner su vida “en espera”
mientras los ayudan a madurar, los crían
con culpa, pero después los hijos se van
y ellos se quedan solos sin compañero, y
por lo general terminan tratando y viendo a
su hijo de 50 como si fuera de 4 años, ya
con el temor de realmente quedarse solos,
se prestan hasta a ser sus proveedores.
FALLAMOS AL ENSEÑARLES LA
DIFERENCIA ENTRE DERECHOS Y
PRIVILEGIOS.
Los hijos tienen entre otros los
siguientes derechos: a la vida, a jugar, a
la libertad de opinar, a una familia, a la
protección contra el trato negligente, a
la alimentación, a ser amados, a recibir
educación, etc.
Los privilegios son concesiones
ganadas por una acción determinada; a
nuestros hijos les compramos cosas, por
ejemplo: lo más actual en videojuegos, o
ropa o zapatos de marca, o una mascota, e
incluso los llevamos al cine o a vacacionar,
les compramos celulares, etc, y todo
GRATIS, a cambio de nada.
Hoy te digo que aunque te sobre el
dinero para complacer a tu hijo, tienes que
enseñarle a ganárselo; él tiene que saber
que las cosas que le gustan, cuestan y
hay que pagar un precio por ellas. Incluso
estas cosas te ayudarán en la negociación
de actitudes y comportamientos.
Enseña a tus hijos valores, pero sobre
todo Empatia y Respeto por los demás.
La palabra autoestima es una palabra
compuesta. Auto: uno mismo, y estima:
amor, o sea, amarse a uno mismo.
Tú no le puedes proporcionar una
valoración positiva de él mismo, porque
confundimos el animarlos y apoyarlos con
aumentar su autoestima y cambiamos la
regla de “si tiene alta autoestima tendrá
éxito en todo”, pero en realidad es al revés
“si tiene éxito en todo y trata de hacer su
mayor esfuerzo aumentará su autoestima”.
Enseñale que valor de una persona está
en lo que es y no en lo que tiene.
No podemos cambiar el mundo de un
día para otro, un mundo bombardeado
por narcoseries, donde la violencia se ha
hecho parte de nuestro diario vivir, pero
si podemos aportar en nuestra familia
verdaderos valores, por el bien de nuestros
hijos y de la Sociedad.
Estos hechos nos deben sacudir y
hacer un alto para darnos cuenta en que
estamos fallando como padres.
Dejemos de señalar a las personas o
niños que son atendidos por psiquiatras o
psicólogos como inadaptados.
Bien por ellos!!!!
Que tienen el valor de buscar ayuda
para sus necesidades.
No culpemos a los maestros o
Instituciones Educativas, si tu que
tienes 2 o 3 hijos no sabes como están
emocionalmente no los ves a los ojos, no
dialogas con ellos, menos un maestro con
50 alumnos.
Espero que estos comentarios te
ayuden a entender el por qué a veces
le pedimos peras al olmo, si en realidad
cosechamos lo que sembramos.
Ánimo es difícil, pero no imposible y
bien vale la pena.
No crees?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario